Apenas visibles, pero totalmente funcionales: los cierrapuertas de pavimento garantizan que sus puertas se cierren de nuevo por sí solas tras la apertura. En cuanto a confort y seguridad no tienen nada que envidiar a los cierrapuertas aéreos. Todas las piezas individuales están integradas en el suelo o la puerta. Los cierrapuertas de pavimento son ideales cuando el diseño de la puerta ha de ser lo más discreto posible, ya sea en portales elegantes o en la construcción de comercios de cierto nivel. En las puertas todo vidrio o de arco, son el único sistema que supera este particular desafío y lo hacen de forma brillante.